Trabajar más horas, no significa trabajar mejor

La medición de horas de trabajo en productividad ha sido uno de los debates a la hora de establecer límites en las jordanas de trabajo.

El trabajo ha sido una de las ocupaciones que han regido la productividad del mundo, ya que todos, en algún punto de la vida, nos enfrentaremos a tener un trabajo, donde el establecimiento de las jornadas laborales ha sido una legislación que se ha venido dando desde la Revolución Industrial.

Con la llegada del trabajo moderno, derivado de los cambios producidos por la revolución industrial, ya que los trabajadores durante esa época no contaban con prestaciones, no tenían un sueldo definido y sus jornadas laborales podían ser extenuantes.

Esto con el tiempo fue cambiando, pero el tema de las horas laborales ha sido una de las cuestiones en donde el debate sigue estando en boga, esto debido a la manera en la que los gobiernos han determinado las jornadas laborales y su relación con la productividad y la vida personal.

Las relación entre horas de trabajo y productividad

Uno de los aspectos que necesitan tomarse en cuenta en el establecimiento de jornadas laborales, es el tiempo productivo. Este hace referencia a las horas durante las cuales una persona está realmente concentrada y puede completar las tareas con eficacia.

Las investigaciones han arrojado que la productividad tiende a disminuir a partir de un cierto número de horas de trabajo, donde se ha establecido que, después de las 40 horas de trabajo, la productividad tiende a disminuir a medida que la fatiga se presenta.

Por otro lado, la atención humana en la que se realizan tareas o se pone atención a lo que estamos haciendo se ha determinado en una estimación de 10 a 20 minutos, aunque en otros estudios se ha encontrado que la atención máxima en la que un humano se concentra, es de 45 minutos. Esto, aunado con la fatiga de trabajar varias horas, produce que nos concentremos menos, que nos distraigamos en otras cosas, que realicemos el trabajo con menos eficacia y que los resultados no sean los deseados.

Otros estudios, han sugerido que trabajar menos crea mayor productividad, donde se ha experimentado con semanas laborales de cuatro días en lugar de cinco. Estos han arrojado que la satisfacción aumenta, debido a que tienen mayor tiempo para enfocarse en actividades personales además de un aumento o mantenimiento del nivel de productividad y humor.

El trabajar más horas, puede provocar agotamiento, menor eficacia y concentración, así como compromiso, ya que los empleados se encuentran menos motivados. Además, los trabajadores no pueden enfocarse en su vida después del trabajo, pues el tiempo disponible para hacer sus tareas personales se reduce.

Se ha encontrado además, que repercute de manera significativa en el salud y el bienestar, como es la salud mental. Según la Organización Mundial de la Salud, los horarios de trabajo largos están vinculados a un mayor riesgo en problemas de salud, como son las enfermedades cardiovasculares y trastornos mentales.

Las horas flexibles y el trabajo remoto

A raíz de la pandemia, la implementación de modelos de trabajo remoto o trabajo híbrido se volvió más la norma cuando los espacios de trabajo impedían el riesgo de contagio mediante el contacto personal.

Esto puso en el mapa la manera en la que se trabaja, en especial, cuando hay trabajos que pueden hacerse de manera remota, lo que significa un ahorro de tiempo de traslados para los empleados, mayor productividad y espacio para realizar actividades fuera del trabajo.

Por otra parte, los horarios flexibles han permitido que los trabajadores puedan cumplir con sus obligaciones laborales y balancear su vida entre el trabajo y la vida fuera de él. En un informe realizado por Gartner, se ha encontrado que el aumento de productividad alcanzó hasta el 43%, así como que el 19% de los trabajadoras afirma que los horarios flexibles les permitió pasar menos tiempo en reuniones y el 26% de los empleados disfruta de la posibilidad de elegir su espacio físico.

Los países del mundo

En varias partes del mundo, la legislación sobre las horas laborales ha cambiado. En Chile, se presentó una legislación laboral que busca cambiar la manera en la que el trabajo tiene injerencia en la vida, donde el Gobierno chileno ha planteado flexibilizar loa jornada laboral para que se reduzca hasta cuatro días presenciales y el resto a distancia. De esta manera, se propuso una jornada mensual de 180 que podrá ser distribuida de diferente manera cada semana.

De acuerdo a la OCDE, Países Bajos trabaja 30.4 horas, Dinamarca 32.4 horas, Noruega 33.8 horas, Alemania 34.5 horas y Finlandia 35 horas. Se ha encontrado además, que países como Noruega la productividad laboral fue de 86.6 dólares por hora trabajada, seguido de Países Bajos con 60.2, Dinamarca con un 59.5 y Alemania con 58.3.

El caso de México

En México, las horas trabajadas superan con creces lo establecido por organizaciones del mundo. En México, se ha encontrado que es uno de los países que más horas se trabajan en el mundo, siendo una media de 52 horas a la semana.

En el país, se ha establecido en la Ley de Trabajo, que el horario laboral consiste en 8 horas, una situación que no se respeta en la práctica, pues son cada vez más las empresas que implementan horarios de trabajo de más de 8 horas, así como trabajar 6 días a la semana, con un solo día de descanso.

Pero lo peor es que mayor tiempo no significa mayor paga, pues se ha encontrado que México tiene de los sueldos más bajos a comparación de las horas trabajadas, lo que posiciona al país como un lugar donde se trabaja mucho, pero se gana poco.

Por otro lado, se ha encontrado que el trabajo realizado no es el más productivo, pues existe tiempo vacío que podría reducirse si las jornadas laborales fueran de menor duración, lo que produciría a trabajadores más felices y más comprometidos con su trabajo.

Han habido intentos de reformar las horas establecidas de trabajo. En el 2023, existió la propuesta llamada #YoPorLas40Horas, un movimiento que busca abogar por la reducción de horas laborales en la semana, aunque, debido a los cambios sucedidos por las elecciones, así como otras reformas, han hecho que esta propuesta haya quedado en pausa.

En declaraciones hechas por la presidenta electa Claudia Sheinbaum, ha mencionado que la reforma de la jornada laboral de las 40 horas se construirá por consenso, aunque si bien se encuentra abierta a que suceda el cambio, la realidad es que no hay planes a futuro de realmente reformar la ley.

Salir de la versión móvil