El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, solicitó al embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, información sobre la intervención del FBI en un operativo en Quintana Roo, luego de una balacera en un hotel que dejó dos turistas canadienses muertos.
Durante su conferencia matutina, el mandatario aclaró que no se opone al trabajo coordinado de las agencias de seguridad, pero no permitirá que se “viole la soberanía” de México.
“Acaba de participar el FBI en un asunto en Quintana Roo, y estamos pidiéndole al embajador de Estados Unidos que nos informe sobre esta participación, si hubo informes o hubo participación de conformidad con las normas. No nos oponemos a que se trabaje de manera coordinada en contra del crimen, pero no podemos permitir que se viole nuestra soberanía”.
Ayer el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, confirmó que en dos semanas la DEA, el FBI y la policía de Canadá llegarán al estado para intercambiar información con las autoridades estatales.
Por otra parte, al ser cuestionado sobre la detención de Facundo Rosas, ex comisionado de la Policía Federal y cercano a Genaro García Luna, el mandatario aseguró no tener mayor información, aunque dijo estar esterado sobre la supuesta participación del exfuncionario en un grupo involucrado en el operativo Rápido y Furioso durante el sexenio de Felipe Calderón.
Facundo Rosas fue detenido ayer por orden de la Fiscalía General de la República (FGR) ya que era buscado por su participación en el operativo “Rápido y Furioso”, con el que se permitió el ingreso de 2 mil 500 armas ilegales a México. El exfuncionario ya se encontraba en el Ministerio Público, luego de que atropellara y matara a una mujer en la alcaldía Álvaro Obregón de la Ciudad de México.
